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Compartiendo los más posible con Mamá... ¡A pesar de su Ansiedad!

Actualizado: 14 dic 2023


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Les cuento que, otra razón por la cual me gusta hacer estas publicaciones para Ustedes es porque tengo la oportunidad, al igual que una excusa, para mirar todas las fotos que tengo archivadas. Es más, la foto que escogí para esta publicación fue una de las primeras que tomé con mi Guerrerita... ¡Mi pequeña Athena! Esta es una de las muchas que llena mis archivos en "Amazon Photos" (así es, mi celular por fin me dijo no más y también me dijo "Ey, ¿no entiendes que no tengo más espacio? Así que comencé a usar mi Amazon Photos con más frecuencia *Ahem* no, no me están patrocinando esta publicación *Ahem* Ja ;)!


Como pueden ver, me gusta empezar mis publicaciones y nuestro tiempo juntos con un poco de humor. Ahora, ¿qué tal sí comenzamos oficialmente la publicación de hoy? *Descargo de responsabilidad* la publicación de hoy es un poco pesada, pero, es algo que has estado en mi mente y mi corazón desde que comencé a batallar con mi salud mental.


El tener una mascota, de una manera extraña, me ha demostrado la importancia de valorar el tiempo que tenemos todos juntos en esta vida. También me ha enseñado lo loco que es el pasar por un luto mucho antes del tiempo adecuado. Ya sé lo que están pensando, "Ay Isabelle, de nuevo con tus locuras. Por favor explícanos a lo que te refieres". Claro que lo haré. ¡Sin pedírmelo ya de todos modos estaba pensando en hacerlo, Ja! ;)


Quizás muchos de nosotros al ir creciendo nunca entendimos completamente el concepto de la mortalidad. Quizás perdimos a seres queridos a una edad temprana y nos dijeron "ya el/ella se fue a estar con Dios", o quizás entendíamos el hecho del que, al fallecer esa persona, nunca lo volveríamos a ver en el mundo físico. Se que esta fue mi realidad y que eso era todo lo que you entendía (el haber perdido a mis abuelos a tan temprana edad me ayudó a aprender este concepto). Al ir creciendo y madurando, también vi la manera de pensar de la sociedad. Vi cómo estamos programados, erróneamente por cierto, a creer que las generaciones mayors son las que "se deben ir primero" (ejemplo: los hijos deben despedir a sus padres...no al revés). Creí esto por mucho tiempo... o por lo menos intenté hacerlo. Para mi salud mental intenté hacerlo y a la misma vez intenté no pensar tan adelantado con mis seres queridos. Esto los hice por mucho tiempo hasta que conocí la ansiedad y el pánico y nos volvimos mejores amigos. Desde ese primer encuentro entre: la ansiedad, el pánico, y yo, he empezado a reflejar más sobre este aspecto natural de la vida. Empecé a comprender más profunda e inténsamente el hecho de que la vida nunca estar garantizada para nadie. Comprendí que la edad no significa nada cuando llega nuestro tiempo de partir de aquí.


Ahora, ¿qué tiene que ver esto con Athena? ¡Todo... absolutamente todo! Todos nosotros que tenemos bebes peludit@s sabemos que, ese hermoso y bendecido día que los traemos a casa nos estamos exponiendo a uno de los peores días de nuestras vidas. Todos nosotros, los papás de peludit@s sabemos que, desafortunadamente, ellos están destinados a partir mucho antes que nosotros y he estado reflexionando mucho sobre esto. Mucho más de lo que me gustaría y mucho más de lo que debería. Agreguemos a esto el hecho de que tengo: familia, amigos, y seres queridos a mi alrededor que ya se han tenido que despedir de sus peludit@s y veo como es el proceso. Veo la tristeza profunda que les queda al saber que no los tendrán a su lado persiguiéndolos ni los tendrán esperándolos al llegar a casa después del trabajo. Puedo escuchar el dolor en sus voces y puedo ver como se pierden sus miradas mientras hablan de los recuerdos que tienen con sus peluditos como si, a la vez, recordaran que esos momentos quedaron en el pasado y jamás volverán.


Con Athena he tenido que trabajar mucho en cambiar mi modo de pensar (gracias de nuevo a mis amigos ansiedad y pánico por esto). Recuerdo una conversación reciente que tuve con una amiga de la familia cuando ella perdió a su peludita. Me dijo algo muy lindo y sabio, me dijo "yo sé que yo acabo de perder a mi peludita, pero, tu acabas de traer a casa la tuya. No quiero que pienses en cómo va a ser este día para ti por que aun tienes muchos recuerdos por venir con tu bebé. Ella está pequeña. Disfrútala y no dejes que estos momentos a tu alrededor apaguen tu experiencia con Athena". Recuerdo estas palabras frecuéntemente. Thena me ha ayudado a entender que, a pesar de que sé que tendremos que irnos por caminos separados en algún momento, mucho antes de lo que me gustaría, tengo que vivir el momento con ella. Tengo que asegurarme de que disfrutemos nuestro tiempo juntas y que estos momentos se queden en mi corazón. Tengo que tomar el tiempo que tenemos para crear un vínculo fuerte con ella y cuidar bien de ella. Déjenme les digo que, no es tarea fácil para alguien que sufre de ansiedad, pero, le agradezco a mi amiga por recordarme esto. Cada que mi mente quiere pensar en eso, miro la carita de mi Athena y recuerdo que ella vale la pena. Que vale la pena crear estos recuerdos con ella. Ella vale la pena, el aquí y ahora y vale la pena disfrutarla. Me digo a mí misma que, sí, ese momento es inevitable y desafortunadamente llegará, pero... hasta que llegue el día... voy a disfrutar de todo lo que la vida me tiene preparado con Athena.


Se que esta publicación es más pesada, de lo que a muchos nos gustaría, especialmente a mí, pero, sentía que tenía que escribirla. Este blog también es mi manera de compartir con todos Ustedes mi jornada física y mental con Athena y, desafortunadamente, esto forma parte de la jornada. Este es el lugar donde puedo venir a compartir mi experiencia con Ustedes y, espero, este diciendo muchas cosas que quizás otros no están dispuestos a expresar. Es una manera de sacar de mi interior: lo bueno, lo malo y lo feo y dejar todo aquí. Otra cosa que me ayuda mucho en estos momentos es ver que no soy la única que piensa de esta manera, las redes sociales me lo confirman. Hay muchos padres de peludit@s que ya se van preparando, décadas antes, para ese temido día. Lo único que podemos hacer es luchar por la felicidad que nos dan nuestros bebes peludit@s mientras los tenemos aquí físicamente y después dejar que llegue el momento en donde tendremos que dejar que la vida tome su curso.



 
 
 

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